¿Cómo nos influye la Luna?

¿Cómo nos influye la Luna?

La luna es el único satélite natural de la tierra, y quinto satélite por tamaño del Sistema Solar. Es bien sabido que la tierra y la luna están sometidas a sus correspondientes fuerzas gravitatorias (gradiente gravitatorio) y que las mareas se producen a consecuencia de ellas.
Pero la luna ejerce más efectos sobre la tierra y los hombres. Todo ser humano está sometido a diversas fuerzas electromagnéticas tanto naturales como artificiales. Entre las naturales, la luna es una de las más importantes. Existen opiniones contrapuestas en cuanto al alcance de la influencia lunar en el hombre, pero parece que es mayor de lo que se ha pensado.
Hay estudios científicos que han demostrado que la luna tiene un efecto sobre los ciclos del sueño de las personas. Hoy se sabe que el día de luna llena se duerme menos y el sueño no es tan profundo.
influencia lunar
También hay informes policiales tanto en Inglaterra, EEUU y Nueva Zelanda que, según sus observaciones, la criminalidad aumenta en luna llena.
En cierta ocasión leí que hay cardiólogos en Suiza que nunca operan en luna llena porque se han dado cuenta que se les mueren más pacientes en quirófano. Y otros han detectado que las heridas provocadas por la cirugía en la boca se recuperan antes o después dependiendo de la fase lunar en la que se haga la intervención.
Pero al margen de todas las consideraciones y contradicciones que hay sobre el asunto, por experiencia personal he podido comprobar que la luna tiene un efecto sobre nuestro organismo mayor del que comúnmente se cree.
Durante los últimos quince años he tenido la oportunidad de tutelar a cientos de personas que decidieron realizar la Cura de la Dra. Hulda Clark. El tratamiento incluye la depuración de hígado, vesícula, riñones y parásitos. Esta es, en mi opinión, la mejor forma de depurar el organismo en un período tan corto como 22 días. Creo hay nada tan completo.
El que escribe es el primero que probó sus efectos. Había leído al respecto, pero no quería recomendarla a nadie sin probarla primero. Sus beneficios fueron tales que marcó un antes y un después para mi salud. A lo largo de los años la he repetido cinco veces. Y ahora viene el dato de interés que está asociado con las fases lunares.
la influencia de la luna

La primera cura que hice fue muy bien y no tuve ningún problema en terminarla. Inmediatamente después, noté un alivio en mis digestiones y una capacidad mayor para digerir los alimentos. De hecho, pude empezar a comer alimentos que antes no podía. Ilusionado por los resultados, volví a hacer la misma cura, con los mismos productos sin variar nada el tratamiento. Y entonces, el último día, comencé a tener una angustia como nunca, y vomité en varias ocasiones. Recuerdo que en aquel momento pensé: “Nunca más volveré a hacer esto.” Cuando pasó la crisis, empecé a preguntarme por qué en la primera no tuve ningún síntoma, pero lo pasé tan mal en la segunda. Y más aún cuando comprobé más tarde que a otras personas les ocurrió lo mismo.
Por aquel tiempo, y sin pensar que tuviera relación alguna, comencé a leer un par de libros sobre la influencia lunar en nuestro cuerpo. Encontré en uno de ellos que decía que dependiendo de la fase lunar en la que nos encontremos la energía y los líquidos en nuestro tienden a ascender o descender. El libro mencionaba que en la fase lunar creciente hasta la luna llena ascienden, y en luna decreciente hasta la luna nueva descienden. Recordé entonces la cura que había hecho y cómo en la primera ocasión no había habido problema alguno pero sí en la segunda. Y comencé a relacionarlo con las fases de la luna. Así que empecé mi tercera cura pero calculando terminarla en luna decreciente. ¡Y no hubo ningún problema al acabarla! Más tarde hice otras dos, y tampoco.
Desde entonces, cada vez que alguien ha decidido hacer el tratamiento le he recomendado tener presente la fase lunar para terminar la cura y ninguno ha tenido los problemas que al principio tuvimos quienes lo hacíamos sin preocuparnos de la fase lunar.
Por último, otra cosa que muchos aseguran y yo mismo he comprobado es que el mejor día del mes para hacer un ayuno es el día de luna nueva. Este es el día en el que el cuerpo más se depura.
Si quieres conocer el calendario lunar que utilizo, y algunas de las influencias que tiene la luna sobre nuestro cuerpo y sobre la tierra, te recomiendo que veas el siguiente vídeo:

Juan Torrontegui

Juan Torrontegui

Naturópata y Técnico Superior en Dietética

Todo empezó con una enfermedad propia que me abrió el camino para hoy, poder ayudar a los demás. Espero poder ayudarte a conseguir la salud y bienestar que otros como tu pudieron lograr.

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